Palacios de la nobleza

Este elegante palacio, cerca del Duomo de Crema, fue construido a partir de 1504 por la familia Benzoni - se dice que esta familia también era propietaria del Palazzo Chigi, sede actual del Gobierno italiano, en Roma. Trabajos posteriores lo convirtieron en un edificio sin igual entre los palacios nobiliarios de Lombardía y, con respecto a la mayoría de ellos, posee una mayor proyección vertical y una planta menos alargada. También son únicos sus huéspedes. El edificio fue bautizado nuevamente como el "Palazzo dell'Innominato", pues se cuenta que en este hotel se albergó el célebre personaje del libro de Alessandro Manzoni "I Promessi Sposi". La elegancia y el lujo de los ambientes lo convirtieron incluso en digno de albergar, en 1509, al soberano de Francia, el rey Luis XII. 

Enmarcan también los paseos por el centro de la ciudad el Palazzo Vescovile (1548 – 1549) y Vimercati – Sanseverino (1590 – 1602), uno de los más bellos de Crema, el Palazzo Bondenti – Terni de Gregorj (1711), con refinados detalles rococó, el Palazzo Foglia (1650 aprox.), que alterna una fachada sobria con lujosas decoraciones del setecientos en el interior; y las villas Albergoni - Arrigoni (1756), decorada con un jardín italiano, y Martini (siglo XIX aprox.), de estilo neoclásico.

Erigido alrededor de 1548, estaba destinado originalmente a ser residencia de los descendientes de las grandes familias venecianas que, en una etapa de su  cursus honorum, eran enviados como podestá a Crema y frisaban con sus escudos de familia los muros de las construcciones. También por este motivo, la sala del consejo está decorada, entre otros elementos, con distintas pinturas al óleo que representan a los podestá vénetos que estuvieron en la ciudad.

El prestigioso Palazzo Benzoni-Frecavalli es actualmente el magnífico marco que alberga la Biblioteca Comunale di Crema. Originalmente, la familia noble Benzoni estableció allí su residencia - en el siglo XIII -, sin embargo, solo con el testamento de un miembro de la familia, Nicolò (1448), se tuvo noticias de la amplitud del edificio, calificado como una gran residencia, capaz de albergar una familia rica con servidumbre y séquito.  Desde la calle es posible admirar el elegante portón de entrada.

Pertenece a una Crema oculta y completamente fascinada por este palacio, habitado por la familia noble Vimercati desde 1422. La entrada principal, sobre via Marazzi, y el lado meridional del edificio, se caracterizan por un estilo sobrio y elegante, que oculta en gran parte las distintas refacciones y el traspaso de propiedad que este edificio afrontó con el paso de los siglos.  Convertido en hotel en el siglo XVIII, sus propietarios embellecieron el interior con muebles, cuadros y otros objetos de valor de los maestros Guido Reni y Guercino, grandes pintores italianos del seiscientos, y de Giorgione, un enigmático artista véneto del quinientos, entre otros. En 1861 se albergó en este hotel Giuseppe Garibaldi. Después de la Primera Guerra Mundial, el palacio regresó a su función de residencia privada - y en 1924 su nuevo propietario, el conde Marazzi, albergó al futuro 'rey de Mayo' Umberto II.