Cremona, una joya en el corazón de la Llanura Padana, fue fundada como una colonia por los romanos en el 218 a.C. La ciudad es rica en historia; testimonio de ello son los numerosos monumentos que se remontan principalmente a la época medieval, como el Palazzo Comunale y el Palazzo Cittanova.
Sin embargo, Cremona es principalmente la ciudad de los violines, de Stradivari y de la música: los talleres de los lutiers, cuyo arte fue reconocido como Patrimonio de la Unesco, se encuentran esparcidos en cada recodo de la ciudad y hacen de Cremona un lugar único y mágico. La maravillosa piazza del Duomo, con el magnífico complejo formado por la Cattedrale, el Battistero, el Torrazzo y el Palazzo Comunale, alcanza para convertir a Cremona en una joya medieval y en una de las ciudades de arte más bellas de la Llanura Padana.